Primera final

Pinto y Messi fueron los grandes protagonistas de la semifinal de Copa del Rey entre Barça y el Mallorca. El empate a uno final da el pase a la final de Mestalla el 13 de mayo.

Los azulgrana empezaron fuerte con un chut de Iniesta que obligó al lucimiento de Lux, pero el juego fluido no aparecía en ninguno de los dos equipos. El fuerte viento dificultaba las rápidas combinaciones de balón y, pese a que no se veía un gran espectáculo futbolístico, la impresión era que el Barça tenía el control del partido y la eliminatoria (le 2-0 del Camp Nou daba cierta tranquilidad). Pero fue el Mallorca quien se adelantó en el marcador y puso en peligro el pase a la final para los azulgrana. Era el minuto 45 cuando Castro batió a Pinto con un fuerte chut desde la frontal que se coló por la escuadra.

En la segunda mitad los mallorquinistas salieron decididos a darle la vuelta a la eliminatoria y, tras un gol de Webó anulado por fuera de juego, llegó la jugada que podía haber decidido el encuentro: Cáceres cometió penalti y fue expulsado. Martí fue el encargado de chutar la pena máxima y, tras un juego de gestos y miradas con Pinto, el portero azulgrana se erigió como protagonista y consiguió evitar el gol.

A partir de este momento, los de Guardiola se encontraron más cómodos en el terreno de juego y con la salida de Messi su juego mejoró notablemente. Fue el argentino el que provocó la expulsión de Josemi, creó peligro en el área de Lux y consiguió el gol del empate en el 82 con un suave toque por encima del portero mallorquinista.

El tanto de Messi y la providencial parada de Pinto permiten al Barça meterse en la primera final de la temporada. Los de Guardiola consiguen así disipar ligeramente las dudas que se habían destapado con los últimos resultados (este es el cuarto partido en el que no consiguen la victoria). La gran cita será en Mestalla el 13 de mayo. Hasta entonces, hay que centrarse en la Liga y en la eliminatoria de Champions contra el Olympique de Lyon en el Camp Nou la próxima semana.

Se confirma el bajón

El partido loco que vivió el FC Barcelona en el Vicente Calderón deja claro que los azulgrana no están pasando por su mejor momento. El Atlético de Madrid consiguió una importante victoria y, de paso, le echó una mano al Real Madrid que se sitúa ya a cuatro puntos del líder.

Salieron a por todas los colchoneros que a punto estuvieron de inaugurar el marcador si el asistente de González Vázquez no hubiera invalidado el tanto. Pero apareció Henry con un fuerte chut contra el que nada pudo hacer Leo Franco. El Barça se adelantaba y parecía tener el partido controlado. Y aún más cuando volvio el Messi de siempre con una jugada de las suyas que dejó atrás a Assunçao y a Pablo y perforó la portería atlética. Pero sólo era el principio: un minuto más tarde, Forlán se inventó un disparo imparable desde fuera del área que metía al Atlético de nuevo en el encuentro. Sobre el terreno de juego, puro espectáculo, ocasiones a bando y bando... Y con 2 a 1 en el marcador llegó el descanso.

El segundo tiempo empezó con los colchoneros algo relajados, hecho que hacía presagiar una victoria azulgrana. Nada más lejos de la realidad. Tras un fallo clamoroso de Eto'o solo ante Leo Franco que hubiera sentenciado el partido, un error defensivo de Márquez permitió a Agüero colocar el empate. Los de Abel Resino tuvieron más de una ocasión para adelantarse en el marcador pero volvieron a perdonar y los culés lo aprovecharon para adelantarse de nuevo con otro tanto de Henry tras pase de Gudjohnsen. Lejos de tirar la toalla, los colchoneros siguieron con su empeño en ataque y Resino sacó a Sinama para conseguir de nuevo el empate. Y le salio redondo: tras una asistencia de Antonio López, el francés trató de rematar pero Henry se lo llevó por delante. El colegiado tardó una eternidad pero, cuando Messi ya estaba en campo contrario, señaló penalti. La pena máxima la transformó Forlán y puso las tablas una vez más. Faltaba la aparición del Kun que, tras un pase en profundidad de Pablo, se quedó solo ante Valdés y esta vez no perdonó. Su tanto le daba la victoria al Atlético de Madrid y el Vicente Calderón se volvio loco. No podían creérselo, igual que los de Guardiola que veían cómo se les escapaban de nuevo tres puntos importantes.

Faltó serenidad en los culés que no supieron tranquilizar el partido y dejaron que los colchoneros les remontaran un resultado muy favorable. No hubo suficiente reacción en los culés que, pese a no dar nunca el partido por perdido, se permitieron el lujo de perder tres puntos más respecto al Real Madrid. Ahora los merengues están a cuatro del liderazgo, el Barça no puede seguir así, es el momento de reaccionar y mostrar de lo que son capaces, tal como lo hicieron en la primera parte de la temporada. En Mallorca tienen su primera oportunidad, se juegan la primera final de la temporada.